Rss Feed
  1. Traducción del artículo 'Fifty Shades' lacks gray matter, as well as heat de USA Today.




    Quedarse sentado aguantando el tedioso y pesado melodrama que es "50 Sombras de Grey" se puede sentir como su propia forma de tortura. 

    Aquellos buscando sexo caliente y pervertido se sentirán decepcionados. Menos de 15 minutos de los 125 de la película tienen escenas de sexo. Discusiones sobre contratos y objeciones a ciertos artículos le ganan al erotismo. Incluso los desnudos gráficos se hacen aburridos (apenas 4 alcanzan clasificación para adultos).

    El diálogo, basado en el best-seller de E.L. James, es hilarante, el ritmo es lentísimo y las básicas. Quizás lo peor de todo sea la nula química entre Jamie Dornan como el multimillonario Christian Grey y Dakota Johnson como la curiosa estudiante universitaria Anastasia Steele.

    Dornan pasa la mayor parte de su tiempo con el ceño fruncido mientras Johnson mantiene su mirada perdida y se muerde el labio. Obviamente, ella fue a la Escuela de Actuación de Kristen Stewart.

    Los dos se conocen cuando Anastasia entrevista a Christian para el periódico de su universidad en las oficinas corporativas [de GRey] en Seattle. Tropieza y cae sobre su cara apenas entra en la oficina. Tal vez fue esta nada-elegante entrada la que inspiró a Christian en su fijación de convertir a Anastasia en su próxima compañera de sadomasoquismo.

    Después de la entrevista, Christian se aparece en la ferretería donde Anastasia trabaja y compra cinta adhesiva, amarras plásticas y cuerda, pese a que no aparenta ser del tipo 'manitas' [maestro chasquilla, en buen chileno]. Tienen algunas otras reuniones sosas que dan a entender que él está obsesionado con ella y que ella está fascinada con él. Pero no logras ver nada de esto a través de su actuación.

    Cristiano desdeña el amor y el romance. Él sólo quiere atraer a Anastasia a su "cuarto rojo del dolor", como ella lo llama - una cámara equipada con látigos, cadenas, esposas y otros juguetes relacionados con el bondage.

    Siendo inocente y virgen, Anastasia no se toma a la ligera la propuesta de Christian, lo que se traduce en aburridas escenas de ella sobre-reflexionando las cosas . Revisa el elaborado contrato con ojo de águila. Su tete-a-tete revisando el documento, tuvo lugar en su oficina con las luces atenuadas, y debía ser un moometo sexy lleno de propuestas sugerentes. El resultado es una escena ridícula para reir a carcajadas.

    A pesar de lo insípidos que resultan sus momentos juntos, Anastasia no puede evitar ser seducida por este atractivo multimillonario que le compra regalos caros, le da órdenes alrededor y que, de forma espeluznante, se aparece cuando menos se lo espera. Una pervertida versión del cuento de la Cenicienta.

    La película está promocionada con calientes escenas sexuales en un ascensor. En la mayoría, sin embargo, la pareja repite los nombres del otro mientras las puertas se cierran. No esperen movimientos apasionados entre cada piso. Digamos que no hará para los ascensores lo que 'No Way Out' hizo para los asientos traseros de las limos.

    '50 Sombras' glorifica la violencia sexual, implicando que las mujeres buscan ser controlados. Lo que ocurre entre adultos en situaciones consensuadas en igualdad de condiciones es una cosa, pero el desequilibrio de poder aquí es sorprendente, sobre todo teniendo en cuenta que '50 Sombras' y sus dos secuelas fueron escritos por una mujer de mediana edad. Otra mujer, Sam Taylor-Johnson, dirigió la película y una guionista mujer, Kelly Marcel, adaptó fielmente la novela. A raíz del aumento de las tasas de ataques sexuales en los campus universitarios, en el ejército y otros lugares, es preocupante que la historia presenta a una ingenua pero bien educada Anastasia buscando superar su aversión de ser abusada, degradada y aislada sólo para complacer a su hombre.

    Se supone que debemos creer que Anastasia podría ser convencida de compratir la predilección de Christian por la dominación y la sumisión, pero Johnson no transmite mucho entusiasmo con su actuación unidimensional. Lo que podría haber sido provocativa sólo se siente como retro-fantasía.

    Digan lo que quieran sobre el Christian dominante, pero al menos se conoce a sí mismo, que es más de lo que se puede decir de la pizarra en blanco altamente sugestionable que es Anastasia en esta tediosa, vacía y miseralmente actuada película.

  2. 0 comentarios:

    Publicar un comentario